Tenía, en el momento de la creación de esta entrada de blog, una inspiración pos sentimiento avasallador que surgió en mí en ese día. Ayer.
¿Se entiende? Bueno, creo que sí; yo al menos lo entiendo. Pero, por si no se llegara a comprender la totalidad de la idea que quiero expresar, aclaro que es algo así como una catarata de sensaciones y emociones (no necesariamente de las más lindas) que se presentan todas juntas y se agolpan en el pecho, o en el cuerpo en general despuntándose su presencia por esa zona del mismo.
Nada especial, muchos lo deben imaginar -y saber- como suele pasarnos a las personas que experimentamos y vivimos todo con una cuota de sentimiento agregado que a veces juega a favor y otras en contra, aunque creo que finalmente siempre es favorable ser y vivir de esta forma, podríamos decir: sentimentalmente dispuesta.
Y así estuve, como habrán estado y estarán también muchas personas más, junto a mi, que sin darse (darnos) cuenta nos congregamos en este universo en el que a veces hay más brillo y otras no tanto, llamado sentimental.
Por lo tanto y aunque sin estar directa y próximamente cercanos nos reunimos por algún lugar en nuestra sensibilidad, podrán entender y captar el reflejo de esta entrada.
Espero que seas de los que se reflejaron con mis líneas. Será indicio de que andamos por un camino similar, un camino que está bueno transitar.
